sábado, 20 de junio de 2015

Performances



Ignacio Ruiz Quintano
Abc

Carmona, jefe de la Planta de Oportunidades del Psoe, prometió a los madrileños el espíritu de Tierno y naumaquias como las de Olivares, y él mismo iba a cortarse una pierna para hacer de Blas de Lezo en el estanque del Retiro, pero todo lo que nos ha traído es una abuela chiflada de la notoriedad (acuerda cuatro citas a la misma hora) y una “performance” municipal con drugos o mendrugos como sacados de la Filmoteca por el Samur tras la ingesta (¡ni un tonto sin su distopía!) de alguna copia en mal estado de “La naranja mecánica” o “Les valseuses” servida por Chema Prado, gárgola en yeso del Cine Doré desde el 89.

Tierno era viejo; Manuela, más. La partidocracia (no la democracia) llevó a la alcaldía a Tierno; a Manuela, también. Tierno hacía mofa de sus promesas; Manuela, también. Tierno decía “Yon Lenos” por John Lennon; Manuela dice “Charles Lebó” por “Charlie Hebdo”. Tierno municipalizó las tetas de Susana Estrada; Carmena municipaliza las tetas de Rita la Portavoza, pues, si Tierno tomó posesión de la alcaldía ante el crucifijo que luego colocó en su mesa de despacho “porque es símbolo de paz”, Manuela cree que el símbolo de paz son las tetas de su portavoza, “pomas eréctiles” temblando “como si fueran de mercurio” en la capilla complutense.

Adolebis in triginta sex! –en el latín de Google.

La enfermedad infantil del comunismo… con 71 años.

Los ingleses tienen al juez Coke, que plantó cara a Jacobo I (“El rey, que protege al Derecho…”, dijo Jacobo. “No, el Derecho, que protege al rey…”, contestó Coke), y los españoles tenemos a Carmena, que piensa lo mismo que Pablemos, sólo que después.
Carmena, que ha sido jueza, enseña que en la España del cambio los delitos (“performances”, en la nueva jerga municipal) no son los que dice la ley, sino los que le parezcan a ella, quien, a todo esto, ya se ha deshecho del palco del Real, adonde acudió citada para el papeleo por Bertrán de Lis, que lo destinará a los pobres.