Foto de Miguel Ángel Valdivielso
El abundante granizo, que en algunos casos superaba el tamaño de un huevo de gallina, también se registró en municipios como Estépar, Buniel, Albillos, San Mamés, Quintadueñas, Sotopalacios, Quintanilla-Vivar y otros muchos pueblos situados en la línea de actuación de esta tronada, un fenómeno meteorológico de gran virulencia, que se inició en a primera horas de la tarde en el límite entre Burgos y Palencia y que en la provincia de Valladolid tomó forma, además, de tornado.