viernes, 19 de febrero de 2010

¡ARGANZUELA! ¡ARGANZUELA!


J. R. M.

Para el año que viene, que no se nos olvide que mejor que a Arco tenemos que irnos a Just Madrid. Lo primero porque está en La Arganzuela, que es Madrid, y no en esos andurriales camino de Guadalajara. Lo segundo porque ahí no hay nada que valga más de 2.000 pavos. Lo tercero porque te evitas ver el careto de todos los conselleiros de todas las conseillerías de España, que van por la feria con cara de yo no fui, como dice la canción. En cuarto lugar porque, en vez de mirarte por encima del hombro pensando ¿y este tío quien es?, en ésta te dan barra libre de gin tonics sin preguntarte qué piezas tienes en tu colección. En quinto lugar, porque aquí el número de vejetes por metro cuadrado, en los stands y en los pasillos, se reduce de una forma exponencial. En sexto lugar, porque tienen el detalle de darte una libretilla para que apuntes lo que te interesa, que se puede utilizar para pedir que te hagan pintarrajos los artistas, y ya te llevas algo. Y en séptimo lugar, porque el opening incluía una juerguecita flamenca, alegría frente a la crisis, para que se vea que los del contemporáneo siempre han sido una gente vital y divertida.