El portugués tiene una moral señorial
Es como un Nietzsche que se puede explicar en la escuela
Lo más parecido a Bernabéu que desde Bernabéu ha pasado por el Bernabéu es… Mourinho: clarividencia, seriedad, agudeza, voluntad y esa inteligente chulería madrileña (nada que ver con el flamenquismo) que pone de los nervios a las “précieuses ridicules” del Régimen periodístico y cultural, donde todo el mundo tiene un amigo argentino que le ha hablado del Ego, el linimento para el músculo cursi del doctor Freud de Viena.
–¡Escándalo, es un escándalo!
–Cuando Bruno dijo que la Tierra se movía, le acusó la ignorancia y la hipocresía –gritó una noche en la tertulia de Pombo el falso Pirandello.
–Mou representa la independencia de criterio. Mou es el hombre que mató a Liberty Valance.
Es como un Nietzsche que se puede explicar en la escuela
Ignacio Ruiz Quintano
Abc
Abc
Lo más parecido a Bernabéu que desde Bernabéu ha pasado por el Bernabéu es… Mourinho: clarividencia, seriedad, agudeza, voluntad y esa inteligente chulería madrileña (nada que ver con el flamenquismo) que pone de los nervios a las “précieuses ridicules” del Régimen periodístico y cultural, donde todo el mundo tiene un amigo argentino que le ha hablado del Ego, el linimento para el músculo cursi del doctor Freud de Viena.
Y si de Bernabéu ya dijo Mendoza que “en la España de hoy (1996) sería un hombre prohibido”, ¿qué podíamos esperar con Mourinho en la Españeta de 2013?
–¡Escándalo, es un escándalo!
En la España de Bernabéu estaba Raphael, que era un tío: “Un alma libre siempre he sido yo / si tengo ganas hago lo que me da la gana / yo soy el que decide sí o no… / Escándalo, es un escándalo. Vivo mi vida…”
Pero en la Españeta de Mou las que pintan son las “précieuses” Madelón y Cathos haciendo aspavientos ante el Ego de Mou como si fuera el “balano embravecido” de Jhon Holmes.
En los beaterios socialdemócratas el Ego (ajeno) es malo, y a Mou se le quiere echar por el Ego.
Mou estaría poseído por el Ego como la joven de “El séptimo sello”, la película de Bergman donde sale la Muerte disfrazada de Alaska, estaba poseída por el Demonio.
Las “précieuses” del antimadridismo (progres, cursis, culés y “hestetas” del Pep, ¡esos “hestetas!”) se revuelven contra el Ego de Mou en defensa de la humildad, que, dicho sea de paso, no siendo religiosa, sólo es bajeza.
–Cuando Bruno dijo que la Tierra se movía, le acusó la ignorancia y la hipocresía –gritó una noche en la tertulia de Pombo el falso Pirandello.
Mourinho lo que dijo (con idéntico resultado) fue que el que se movía era Casillas.
Antes de eso, Hughes, que tiene el don de verlas venir, había visto a Mourinho tan necesario a la España actual como hubiera resultado George Best a la España de los sesenta.
–El portugués es viril, seco, íntegro, profesional, competitivo y tiene una moral señorial. Es como un Nietzsche que se puede explicar en la escuela.
Pero en la escuela impera el “roncerismo”, atavismo peor (desde la ponzoña hispánica) que la hipocresía y la ignorancia.
–Mou representa la independencia de criterio. Mou es el hombre que mató a Liberty Valance.
Para nuestros poetas del perejil, en cambio, Mou sólo habría sido un Unamuno impaciente, por poner el caso de un egotista tremendo que no tuvo a Karanka para atusarle el Ego:
–Creo en nosotros, los vascos, y sobre todo en mí. ¿Soberbia? ¡Bah! Dicen que Rousseau no hizo toda su vida más que hablar de sí mismo. Y Rousseau hizo más por Francia que Lesseps. Y ni Spinoza ni Kant ni Fitche sé que se ocuparan nunca en transportes ferroviarios.
Con la improvisación para el Plus de un Rastrillo (¡Nuevo Futuro!) de guantes y camisetas en el Bernabéu, el sábado arrancó oficialmente la campaña electoral de Casillas, a cuyos salones de Pozuelo acudirán las “précieuses” a tomar el té de las cinco a meñique levantado, que en su caso es pulgar bajado para el entrenador (de turno).
Del Ego de Mou a la modestia de los Nanines.
RATAPLÁN
Entregar el poder de los vestuarios a la arbitrariedad de los diosecillos en chancletas es lo más parecido a un rataplán, o “plan de las ratas”, según el Diccionario Cómico del poeta Bustamante. Y sólo un rataplán puede ser el plan B de Madrid (y Barça) en el “cul de sac” en que ha caído. Lo dijo Del Bosque antes del Ego (noviembre de 2000, antes de ser marqués): “Va a ser muy difícil que aquí dure un entrenador. Hay una serie de circunstancias que van minando la imagen del técnico. Si es duro, porque es duro; si es blando, porque es blando. Si hace hincapié en la táctica, también. Si deja hacer a los jugadores, también…”
Entregar el poder de los vestuarios a la arbitrariedad de los diosecillos en chancletas es lo más parecido a un rataplán, o “plan de las ratas”, según el Diccionario Cómico del poeta Bustamante. Y sólo un rataplán puede ser el plan B de Madrid (y Barça) en el “cul de sac” en que ha caído. Lo dijo Del Bosque antes del Ego (noviembre de 2000, antes de ser marqués): “Va a ser muy difícil que aquí dure un entrenador. Hay una serie de circunstancias que van minando la imagen del técnico. Si es duro, porque es duro; si es blando, porque es blando. Si hace hincapié en la táctica, también. Si deja hacer a los jugadores, también…”
Va a ser muy difícil que aquí dure un entrenador