BURROS Y BUEYES
-Si San Francisco fue como ese burro común o domesticado que llevó a Cristo a Jerusalén, Santo Tomás, quien de hecho fue comparado con un buey, se pareció en cierto modo a ese monstruo apocalíptico de un misterio casi asirio: el buey alado.
SANTO TOMÁS DE AQUINO / G. K. CHESTERTON
Ignacio Ruiz Quintano
-Si San Francisco fue como ese burro común o domesticado que llevó a Cristo a Jerusalén, Santo Tomás, quien de hecho fue comparado con un buey, se pareció en cierto modo a ese monstruo apocalíptico de un misterio casi asirio: el buey alado.
SANTO TOMÁS DE AQUINO / G. K. CHESTERTON
Ignacio Ruiz Quintano