Recuperada de la falda del Castillo de Burgos el proyectil de piedra que quedó al descubierto tras el incendio que devoró dos hectáreas de terreno el pasado 23 de septiembre. Lo más probable es que el bolaño fuera lanzado durante el asedio de Fernando el Católico sobre la fortaleza burgalesa en el año 1475, durante la contienda entre Isabel I y Juana la Beltraneja. «Decidió la contienda una profunda brecha abierta por las lombardas (cañones) en el muro, que cayó en gran parte, arrastrando entre sus ruinas los últimos escrúpulos de aquella obstinada gente (en alusión a los partidarios de la Beltraneja)». El bando de Juana capitularía poco después. Numerosos ‘bolaños’ de piedra fueron arrojados por esas lombardas durante el asedio de las tropas de Fernando el Católico a la fortaleza del Castillo.