viernes, 14 de febrero de 2025

El juicio del beso

 

El Beso. Gustav Klimt

 

Las Fuerzas del Mal en el Friso de Beethoven. Gustav Klimt



          Francisco Javier Gómez Izquuerdo

            Antes del 20 de agosto de 2023, día de San Bernardo de Claraval, éramos legión los que creíamos que Don Luis Rubiales merecía ser encausado y juzgado por evidencias varias, alguna de ellas harto llamativas por mediar familia en cosas de la Federación Española de Fútbol. "Pablo, Pablito, Pablete", "Pedrusquete", "Villarato".., no se ha conocido presidente en la FEF libre de sospecha y ¡vaya por Dios! de culpa.


             De lo que salió por televisión el día de San Bernardo, ha dado cumplida cuenta el periodismo escrito y audiovisual, pero da la sensación, escuchando lo que se dice en las calles, que los espectadores no tienen opinión unánime y discrepan ante la doctrina de lo políticamente correcto. Está acabando el juicio y hemos visto pasar a no sé cuántos "empleados" de la FEF, en una causa sumarísima en la que se persigue sobre todo si hubo presión de Fulano, Zutano y no sè cuántos Menganos para minimizar el "escandaloso beso" y que la víctima "de agresión sexual" disculpara a Don Rubiales en público. Días convulsos aquellos para los protagonistas con declaraciones de asociaciones, sindicatos y opinadores políticos que gritaron lo buenos que eran ellos y lo asqueroso que resultaba Don Rubiales. El Gobierno ya no admitía al otrora sindicalista como de los suyos por mor de ciertas evidencias e inquietantes rumores motrileños y en vista de que la víctima no acudía al Juzgado, el día 28 intervino la Fiscalía tras seis denuncias de particulares y asociaciones. El 6 de septiembre, 15 días después del "Beso", la víctima presentó denuncia... y hasta el juicio.
     La gran mayoría de los juicios en causas penales no se celebra porque se llega a una conformidad entre las partes. En éste de Don Rubiales tal solución era a todas luces imposible porque la parafernalia necesita ser sacada a la contemplación pública en las ocasiones a propósito. Visto el caso fríamente, como lo estarán viendo los delincuentes presuntos y confesos en los patios talegueros, todos han perdido antes de que el juez dicte sentencia. El primero Don Rubiales que ha dejado de cobrar 675.761, 87 € brutos anuales que se le quedaban en 371.669,03 limpios; 30.972,40 al mes. Entre delincuentes se estima que no puede haber condena mayor. Pierde Jorge Vilda que tras conseguir el Mundial se vio en la calle por, al parecer, intentar mediar (presionar) entre su jefe y su pupila. Grave delito al parecer. Pierden unos cuantos colocados en la Federación por amistad presidencial que también mediaron-presionaron... y pierde la futbolista, condenada a pasar muy malos ratos desde el día de San Bernardo... y los que a mi modesto entender, le quedan.
       ¿Y no ganan las mujeres que se verán protegidas de sujetos así? Pues mire usted, rotundamente, no. Sólo gana ésa secta fanática que se ha apoderado de las voluntades y a la que se han subido los individuos e "individuas" de mayor perversidad. He visto un vídeo de hace años en el que Mapi León y Dani Alves, representando al Barcelona. se proclamaban adalides de la secta. Mapi León es la futbolista que se comporta "mu feamente", como Michel con Valderrama, con una jugadora del Español. A la secta no se le ve intención de hacer con mujer lo que hace con hombre. A la secta le falta un Errejón que de un paso adelante y grite por las calles y pinte por las paredes "Daniela Caracas somos todos y todas".

       Uno cree que la jugadora víctima de Don Rubiales padeció presiones por todos los puntos cardinales. Esperemos que el Derecho y no las presiones juzguen y sentencien.