Ignacio Ruiz Quintano
Abc
Courtois, Militao, Güler, Vinicius, Aureliano, Bellingham, Arribazalaga, Camavinga, otra vez Vinicius… (y tocamos madera). El hipogeo del Nuevo Bernabéu estaría entre el estanque de Betesda y los paralíticos que se describe en las Escrituras y el caldero de las brujas de Macbeth, que eran tres, en la primera escena del cuarto acto:
Bruja primera: “Tres veces maulló el gato atigrado.” Bruja segunda: “Tres y una más gimió el erizo.” Bruja tercera: “Llegó el momento, nos anuncia la arpía.” Bruja primera: “Bailemos en torno al caldero y alimentémoslo con entrañas envenenadas. Tú, sapo, que durante treinta y un días y otras tantas noches has sudado veneno bajo fría piedra, serás el primero que cuezas en el caldero encantado.” Bruja tercera: “Redoblemos el trabajo y el afán, y arderá el fuego y hervirá el caldero.”
Las brujas de Macbeth revuelven su caldero y Ancelotti levanta su ceja. ¡Qué no daría Xavi por una excusa como la del caldero de las brujas de Macbeth, él, que tiene que andar excusándose con el entorno, con las críticas de la prensa, con la mala suerte en los sorteos, con las pérdidas de tiempo de los contrarios, con las dimensiones de los campos, con el césped alto y el césped seco, con el sol que raja y con la intensidad de los rivales...!
De lo que no tenía, Ancelotti pidió a Harry Kane y le trajeron a Joselu (es verdad que el karma de Kane con los títulos es bastante inferior a su karma con los goles), y de lo que tenía (mucho y muy bueno), se le ha caído todo el sombrajo.
–Cada vez que veo aparecer el nombre de Harry Kane junto al balón del partido, con un hat-trick, vomito. Sigo pensando: “¿Por qué?. ¿Por qué no avanzamos para contratarlo?” –llora ahora Rio Ferdinand, ex del United.
Si no fuera por la Champions, pensaríamos que es una bendición, pues ayudaría a tomar, al fin, la decisión de competir en lo que sea la Liga española con el segundo equipo, sobre todo en esos pueblos donde la única diversión es enviarle la tuna a Vinicius, en cuya defensa, por cierto, ha salido Javier Clemente: “Te digo una cosa de Vinicius: la primera temporada que jugó en el Real Madrid ya le querían echar. El público (¡los piperos!) también, y era buenísimo. ¿Y ahora que dicen de él? Ha sido un error de muchos periodistas. Decían que había que echarlo porque era un ‘madero’, que no marcaba un gol. Dos años después resulta que es buenísimo. Hubo muchos que se equivocaron y a ningún periodista le han echado del trabajo”.
Sobre el periodismo madrileño, precisamente, que ya no es el de Cañabate, ha abierto la boca Gareth Bale, y lo ha hecho para aconsejar a su paisano Bellingham: “Mi mejor consejo: juega al juego de lo que supone estar en el Real Madrid. Porque, si no juegas y no haces lo que la prensa quiere, hablar con ellos y en español, básicamente ser una marioneta, vas a recibir muchos palos. Ves a los Galácticos y actúan como tal. Ellos hacen lo que quiere la prensa y juegan a lo que es ser del Real Madrid. Quizás esa fue mi perdición”.
La perdición de Ancelotti sería liquidar la temporada en blanco, aunque, con el estado de salud de la plantilla, ¿qué podría hacer? ¿Un “remake” de “Las chicas de la Cruz Roja”, con Jabois de Augusto Algueró?
La parte peor en lo que queda de temporada será volver al culebrón Haaland-Mbappé, que es ponerse por enésima vez en la situación del asno de Buridán, que, entre un haz de heno y otro haz de heno, muere de hambre por no saber con cuál de los dos quedarse.
En cualquier caso, “haberlas, haylas”. Recordemos, por ejemplo, a aquel hechicero de Ghana, Nana Kwaku, que maldijo, sin éxito, a Cristiano Ronaldo para que no sanara de su rodilla antes del Mundial de Brasil. Recordemos también que Pujol, el forjador de la Cataluña actual, una, grande y culé, y flamante sede de la soberanía española, tenía a la bruja Adelina, octogenaria que vivía en “las montañas” de la parroquia de Engolasters Engordany, en Les Escaldes, el segundo municipio de Andorra.
–La bruja hacía una serie de conjuros para “predecir el futuro por el método de frotar por la espalda y el cuello y luego romper un huevo”. Si al romper el huevo “aparecía negro”, es que se había llevado “la energía negativa” de la persona conjurada…
O eso declararon los testigos de cargo en la causa contra el padre de la cosa catalana. No es moco de pavo. La Adelina de Pujol. La Circe de Homero y su sobrina, Medea. La Conidia de Horacio. La Ericto de Lucano, el cordobés que versificó las guerras civiles de César y Pompeyo en la “Farsalia”. Ancelotti debe ocuparse ahora de las meigas. Jacob Burckhardt pondera la cultura brujeril en el Renacimiento italiano: “En la hermosa lengua d los italianos al poder demónico de los fenómenos naturales le faltaba muy poco para adquirir una grandeza poética”.
EL FAIR PLAY, TONTOS
El City, que es decir Catar, que es decir Mundial, que es decir Messi, que es decir Balón de Oro, que es decir lo que no se puede decir, vuelve a andar en riesgo de perder puntos, ¡qué barbaridad!, por saltarse el “fair play” financiero, aquel invento de Platini contra el plutocratismo del Madrid y en defensa del mileurismo (catarí) del Barcelona, el equipo de Pep (“trabajar con Guardiola es mejor que el sexo”, dijo una día Alves) que no va a ser ni amonestado por diecisiete años de pagos acreditados al vicebaranda de los árbitros.
[Lunes 20 de Noviembre]