CAMILO JOSÉ CELA
1916-2002
“Te diría al oído la palabra todo / Si descubriese de repente que sirve
para algo / Y vale para lo que quisiera que me oyeras / En un profundo
silencio. / Sé bien que me estoy muriendo pero no de vejez sino de amor /
Y también sé que te estoy matando pero no de juventud sino de amor /
(Aunque esto sea muy difícil de explicar). / Cuando la esperanza se
convierte en quebradiza realidad / Y todos los misterios están ya
maduros para dejar de serlo / Una rara sensación de olor invade el
corazón del hombre / Y pide auxilio a los fantasmas. / Sé que no me
negarás un recuerdo de mínima caridad / Y sé que no me vas a tupir el
hueco que dejo en tu corazón con la amargura del olvido del luto que ya
no lo es. / Tus palabras no me sirven pero me están ayudando a morir de
estupor. / Te juro que ignoraba los casi cien acrósticos / Todos
bellísimos y ciertos / Que podían hacerse con las letras de la palabra
amor.” (Poemilla para el día de los reyes del año MMII.)
IGNACIO RUIZ QUINTANO
(Del libro Serán ceniza, mas tendrá sentido / Ediciones Luca de Tena, 2006