Intimidades de Maestro Ansaldi: su experiencia en hoteles y eventos privadísimos.
(Dedicado a su mentor, Angelito Analía Medina,
quien alguna vez le sirvió whisky a Galtieri y a Viola)
Al primero que vi fue a Carlos Scazziota, sin Violeta y medio en bolas corriendo por la cocina del club Gimnasia y Esgrima. ¿Que por qué corría? -todavía me lo pregunto.
Le vi los pies desnudos a Mirta Legrand. Me pidió si por favor le podía alcanzar el calcio para uñas de un bolso que tenía.
Serví a un Tom Jones en zunga. Me decía Micky.
A Madonna la miré a los ojos (tenía lentes de contacto creo). Presentó una queja. Casi me echan.
Lo vi a Joaquín Galán y a Pacho O´Donell en calzoncillos. Me quedé con ganas de conocer a Lucía.
A Roberto Baggio le serví una liebre que él mismo había cazado. Me dio pena este animal en la cocina.
Luché al estilo vale todo con Michelle Rodriguez; fue una mañana en el gimnasio de un crucero.
A Emilio Disi lo agarré saliendo del baño de su habitación. Olía a fresas salvajes.
Robert Duvall me pellizcó cariñosamente los cachetes de mi cara. Desconozco el motivo; algo me dijo en español pero no entendí.
Vi a Duhalde en bata y ojotas. Le serví un cortado con medio sobre de edulcorante.
Los vi a Calamaro y a Dárgelos besándose mientras nadaban en la piscina del hotel. Debe haber alguna foto sacada con celular.
A Michael Douglas le tomé un poco del Cristal que dejó. Gotas.