Valle de Esteban
Y sobre todo esto, ciertos detalles de delicadeza conmovedora, como éste de fijar en una tablilla, ante cada vaca, su nombre y la fecha probable en que parirá; o el más atento de sujetarle la cola en alto, unida por una cuerda a otra cuerda que corre a lo largo del techo, para evitar que se manche el movedizo apéndice.
Wenceslao Fernández Flórez