Burgos
El 14 de octubre de 1805 don José Victoriano Gómez cumplía 71 años. Se levantó a los sones acompasados de las campanas de San Lorenzo, San Gil, San Lesmes y San Cosme, tomó una jícara de chocolate para entonarse, visitó a su barbero, que vivía, como él, en la calle Cantarranas La Mayor, y fue con su esposa, doña Vicenta, y su hijo Luis a oír misa a la Catedral. Lo celebró con un prodigioso banquete -sopa de menudillos, truchas del Arlanzón, cangrejos en salsa, empanada de ternera con cebolla y pimientos, perdices escabechadas, asado de cordero, natillas, rosquillas de anís, pestiños y bizcochos, todo ello convenientemente regado con vino de La Rioja- y un concierto en su casa con piezas de Boquerini y Haydn.