El 29 de Enero último ha muerto en la casa de fieras del Jardín de Plantas de París el chimpanzo macho del Gabón, que llegó a aquella ciudad en Diciembre de 1852.
Este animal, según dice un periódico de París, es el primero de su especie que ha vivido más de un verano en una casa de fieras. Las causas que han contribuido a prolongarle la vida, a pesar de su cautiverio, son los cuidados de su guardián, y muy particularmente el que se ha tenido de no dejarlo nunca sin la compañía de otros monos, como antes se había hecho con los orangutanes y con otros chimpanzos. Se dice que en el momento de morir comenzaban a brotarle los dientes caninos. En lo que no cabe duda es en que cuando murió no tenía un pelo en su cuerpo. Durante su enfermedad se divertía en hacer torcidas con ellos y arrancárselas después.